08 abril 2015

Superioridad de El Mesías

(Es necesario que tengas una Biblia para leer todas las referencias en este estudio) 

¿Por qué Juan el bautista establece que El Mesías es superior a todo? 

Es importante entender el contexto por el cual Juan el bautista es llevado a hablar acerca de la superioridad de El Mesías. Este contexto lo encontramos en el evangelio de Juan 3.22–30. 

Veamos algunos puntos claves de este pasaje: 

- Juan el bautista dio testimonio sobre El Mesías (ver evangelio de Juan 3.28). Esto nos lleva al pasaje donde él dijo esto (ver evangelio de Juan 1.19–34) 

- Tanto en Juan 3.28 como en su referencia Juan 1.20 dice que él no es "el Cristo". 

"Cristo" en griego significa "ungido". Traduce, en la LXX, la palabra Mesías, término que se aplica a los sacerdotes que eran ungidos con el aceite sagrado, especialmente al sumo sacerdote (p.ej. Levítico 4.3,5,16). El título jo Cristos, "el Cristo", no se usa de Cristo en la versión LXX de los libros inspirados del AT. En el NT la palabra se usa frecuentemente con el artículo, del Señor Jesús, como un apelativo más que como un título (p.ej. Mateo 2.4; Hechos 2.31); sin el artículo (Lucas 2.11; 23.2; Juan 1.41) (Fuente: "Vine, Diccionario expositivo de palabras del Antiguo y del Nuevo Testamento, exhaustivo" ed. Caribe)
 
- El término "Cristo" es, entonces, el equivalente griego del nombre hebreo para "Mesías".

"Mesías" en hebreo significa "ungido; Mesías". Se refiere a alguien que han ungido con aceite, simboliza la unción del Espíritu Santo para tareas específicas. Se ungían a reyes (1 Samuel 24.6), sumo sacerdotes y algunos profetas (1 Reyes 19.16). El vocablo a veces se translitera "Mesías". Después de la promesa a David (2 Samuel 7.13), mashiaj se refiere inmediatamente a la dinastía davídica, pero al final apunta hacia el "Mesías", Jesucristo (cp. Salmos 2.2; Daniel 9.25; Juan 1.41) (Tomado y adaptado de "Vine, Diccionario expositivo de palabras del Antiguo y del Nuevo Testamento, exhaustivo" ed. Caribe)

(Hago mención de estos términos por dos razones; 1) primero porque Juan el bautista especifica que él no es el Mesías enviado para traer salvación y vida eterna; 2) creo que, fieles al estudio de la Palabra, debemos regresar a los términos dados por nuestro buen Padre Celestial estableciendo así sana doctrina) 

- Sin embargo, la discusión no está dirigida al término "Cristo" sino que se centra en una preocupación de los discípulos de Juan en el sentido de que El Mesías fuera su competencia (Juan 3.25)

- Juan el bautista, en lugar de sentir celos, exhibió fidelidad y humildad ante la superioridad de la persona y el ministerio de El Mesías y establece cinco razones para reconocer la superioridad de El Mesías que nosotros debemos hacer nuestras en nuestra vida diaria.  (Juan 3.30)

Estas "razones" están dadas por Juan el bautista y se encuentran en el texto basado en el evangelio de Juan 3.31–36. En cada una de estas "razones" vamos a comparar el texto base con otros textos de las Escrituras para "justificar" el testimonio y las razones de Juan el bautista.

Primera Razón: El Mesías es de origen divino. Evangelio de Juan 3.31 dice: "Él vino de lo alto y es superior a cualquier otro. Nosotros somos de la tierra y hablamos de cosas terrenales, pero él vino del cielo y es superior a todos." (Juan 3:31 NTV) 

La Biblia establece la divinidad del Mesías y algunos textos que podemos observar en las Escrituras son los siguientes (Génesis 1.6, 9, 14, 20, 24, 26; Juan1.1, 14) Comparar los versículos del primer capítulo de Génesis con los versículos del primer capítulo de Juan son, de manera especial, muy importantes. Génesis nos dice que el Creador dijo y fue hecho, esto significa que el Creador creó todas las cosas con el poder de Su Palabra y el evangelio de Juan nos dice que la Palabra estaba desde el principio, dando a entender el comienzo de todas las cosas, y que esta Palabra es el Creador y esta Palabra vino y habitó entre nosotros haciendo referencia al Mesías. 

Es por este motivo que la primera razón que nos da Juan el bautista para establecer la superioridad de El Mesías es que es de origen divino

Segunda Razón: El Mesías, al ser de origen divino, conoce todo lo verdadero por experiencia propia y de primera mano. Evangelio de Juan 3.32 dice: "Él da testimonio de lo que ha visto y oído, ¡pero qué pocos creen en lo que les dice!" (Juan 3:32 NTV)

Juan 1.3, 4  nos dice que todas las cosas fueron hechas por medio de Él y que Él le dio vida a todo lo creado, esto nos recuerda el pasaje de Génesis 1. Pero también podemos observar en las Escrituras (Biblia) el pasaje que se encuetra en Colosenses 1.15–20 dando testimonio de cómo Él estaba plenamente de forma activa y creadora en toda la creación. 

Estando El Mesías de manera activa y creadora en toda la creación Juan el bautista establece que Él conoce todo por experiencia propia y de primera mano

Tercera Razón: El Mesías, al ser de origen divino y conocer todo lo verdadero por experiencia propia y de primera mano, podemos decir que siempre estuvo de acuerdo con el Padre y por lo tanto su testimonio es válido. Evangelio de Juan 3.33 dice: "Todo el que acepta su testimonio puede confirmar que Dios es veraz." (Juan 3:33 NTV)

Ya hemos establecido la relación que hay en el Mesías como el Creador en pasajes como Génesis 1, Juan 1 y Colosenses 1. Pero encontramos también la relación entre el Mesías y el Padre en los siguientes pasajes Juan 1.2, Juan 14.8–11, Juan 5.19, 20 los cuales establecen que el testimonio de El Mesías es uno con el del Padre. 

Pero, para poder afirmar que el testimonio de El Mesías es completamente válido, comparto con ustedes estos siguientes pasajes:

Los fariseos respondieron: —¡Tú haces esas declaraciones acerca de ti mismo! Un testimonio así no es válido. —Estas afirmaciones sí son válidas, aunque las diga de mí mismo —respondió Jesús—. Pues sé de dónde vengo y adónde voy, pero eso es algo que ustedes no saben de mí. Ustedes me juzgan con criterios humanos, pero yo no juzgo a nadie. Y, si lo hiciera, mi juicio sería correcto en todo sentido, porque no estoy solo. El Padre, quien me envió, está conmigo. La misma ley de ustedes establece que, si dos personas concuerdan en algo, su testimonio se acepta como un hecho. Yo soy uno de los testigos, y mi Padre, quien me envió, es el otro. (Juan 8:13-18 NTV)

»Si yo diera testimonio en mi propio favor, mi testimonio no sería válido; pero hay otro que también da testimonio de mí, y les aseguro que todo lo que dice acerca de mí es verdad. De hecho, ustedes enviaron a sus hombres para que escucharan a Juan el Bautista, y el testimonio que él dio acerca de mí fue cierto. Por supuesto, no necesito testigos humanos, pero digo estas cosas para que ustedes sean salvos. Juan era como una lámpara que ardía y brillaba, y ustedes se entusiasmaron con su mensaje durante un tiempo; pero yo tengo un testigo aún más importante que Juan: mis enseñanzas y mis milagros. El Padre me dio estas obras para que yo las realizara, y ellas prueban que él me envió. El Padre mismo, quien me envió, ha dado testimonio de mí. Ustedes nunca han oído su voz ni lo han visto cara a cara, y no tienen su mensaje en el corazón, porque no creen en mí, que soy a quien el Padre les ha enviado. (Juan 5:31-38 NTV)

Por lo tanto, siendo Juan el bautista un testigo, El Padre que lo envió otro testigo, y las mismas obras de El Mesías otro testigo, podemos entonces, afirmar lo que Juan el bautista dio como razón para establecer la superioridad del Mesías, que el testimonio de El Mesías es uno con el del Padre.

Cuarta Razón: Siendo El Mesías uno con el Padre y el mismo Creador experimentó el Espíritu de manera ilimitada. El evangelio de Juan 3.34 dice "Pues él es enviado por Dios y habla las palabras de Dios, porque Dios le da el Espíritu sin límites." (Juan 3:34 NTV)

El profeta Isaías profetiza que sobre El Mesías estará el Espíritu, algunos pasajes que podemos mencionar son Isaías 11.1, 2; Isaías 42.1; Isaías 61.1 este pasaje es especial porque tiene conexión paralela específica con el evangelio de Lucas 4.18-21 donde El Mesías claramente especifica que se ha cumplido en Él esta palabra, declarando así que Él tiene el Espíritu dado por el Padre. Juan el bautista también da testimonio de esto citado en el evangelio de Juan 1.32, 33. 

De esta manera es que Juan el bautista, siendo conocedor de las profecías dadas por Isaías, puede identificar que la cuarta razón por la cual establece la superioridad de El Mesías es porque esperimentó el Espiritu de manera ilimitada

Quinta Razón: El Mesías es supremo porque el Padre mismo, en su soberanía, le otorgó tal preponderancia. El evangelio de Juan 3.35 dice: "El Padre ama a su Hijo y ha puesto todo en sus manos." (Juan 3:35 NTV)

El pasaje que se encuentra en el evangelio de Juan 5.19–23 es muy claro para establecer este punto. Dice: Entonces Jesús explicó: "Les digo la verdad, el Hijo no puede hacer nada por su propia cuenta; solo hace lo que ve que el Padre hace. Todo lo que hace el Padre, también lo hace el Hijo, pues el Padre ama al Hijo y le muestra todo lo que hace. De hecho, el Padre le mostrará cómo hacer cosas más trascendentes que el sanar a ese hombre. Entonces ustedes quedarán realmente asombrados. Pues, así como el Padre da vida a los que resucita de los muertos, también el Hijo da vida a quien él quiere. Además, el Padre no juzga a nadie, sino que le ha dado al Hijo autoridad absoluta para juzgar, a fin de que todos honren al Hijo así como honran al Padre. El que no honra al Hijo, por cierto tampoco honra al Padre quien lo envió." (Juan 5:19-23 NTV)

Al establecer todo lo anterior, a Juan el bautista no le queda mas que afirmar que su quinta razón para demostrar la superioridad de El Mesías sobre todas las cosas, es que el Padre le otorgó tal superioridad.

Por lo tanto, al pensar en todo esto, nuestra actitud debe ser la misma que tuvo Juan el bautista cuando declaró haciendo referencia al Mesías "Él debe tener cada vez más importancia y yo, menos". (Juan 3:30 NTV) 

Ese es el desafío para nosotros en la actualidad que vivimos en un mundo egolátrico, humanista y narcisista. Establecer la superioridad de El Mesías sobre todo nos debe llevar a arrepentirnos de nuestras actitudes egoístas, humanistas y narcisistas, para hacer de Él nuestro Soberano y depender de Él en todo sentido de nuestra vida. 

En el próximo estudio responderemos la pregunta ¿Por qué creer en el Hijo me da vida eterna? derivada del evangelio de Juan 3.36 que dice: "Los que creen en el Hijo de Dios tienen vida eterna. Los que no obedecen al Hijo nunca tendrán vida eterna, sino que permanecen bajo la ira del juicio de Dios." (Juan 3:36 NTV)

Bendiciones!!